MONTESA. Mitos de dos ruedas
Sanglas, de los hermanos Javier y Martín Sanglas, es la única moto catalana que llevó el nombre de sus creadores mientras duró la fabricación, desde 1945 hasta 1981. Sanglas fue única también por otros motivos: no participó en competiciones deportivas y se especializó en cilindradas altas (350 cc y 500 cc) cuando eso era casi un lujo. El sordo chu-chuf de las Sanglas es todavía un sello de distinción.
Montesa fue fundada el 1944 por Pere Permanyer y Francisco Bultó. Tomaron el nombre de la antigua orden medieval de Montesa, pero en el logo no figura su característica cruz, sino una especie de sello de lacre con una M de inconfundible trazo gótico. En sus primeros momentos llevaba un pequeño añadido al pie: "B & P. Barcelona. Fabricado en España". Se supone que son las iniciales de Bultó y de Permanyer. Las discrepancias entre ambos acabaron con la salida del primero, que se lanzó a competir con Montesa con la marca Bultaco, una alteración de su nombre y apellido, Paco Bultó. La rivalidad entre ambas marcas fue tan intensa que todavía perdura. Montesa consagró el lema "Viva Montesa" y Bultó la imagen de un puño enfundado en un guante de motocross con el pulgar en alto.
Derbi es una aglutinación abreviada de Derivado de Bicicleta, porque procede del taller de bicicletas que Simeó Rabasa abrió en Mollet en 1922. Luego fueron las bicicletas Rabasa y después las motos Derbi de pequeña cilindrada. La fábrica se instaló en Martorelles, en el cinturón motociclístico de Barcelona: Derbi (Martorelles), Bultaco (Sant Adrià), Montesa (Esplugues), Sanglas (l'Hospitalet), Ossa (Zona Franca).
Rieju es una marca formada por los apellidos Riera y Juanola. En 1934 Lluís Riera y Jaume Juanola abrieron en Figueres un negocio de accesorios para bicicletas. Después de la Guerra Civil fabricaron algunos microcoches y en 1945 acabaron especializándose en motocicletas. Actualmente Rieju exporta más de la mitad de la producción.
La moto que mejor canta
Los cambios de objetivo empresarial han sido frecuentes. El más llamativo es el de Ossa. Sus motos se empezaron a fabricar en los años cuarenta, pero la empresa de Manuel Giró había fabricado antes proyectores de cine comercial. De ahí, OSSA, acrónimo de Orpheon Sincronic Sociedad Anónima. Lo de Orpheon y Sincronic tenía su miga, pues llegaba el cine sonoro. Los proyectores sincronizaban las imágenes con la banda sonora y los mejores lo hacían con la potencia de un orfeón.
Salut!!!
