El hilo venía a decir más o menos lo siguiente:
Aunque rodemos en compañía de “amigos” o “compañeros” del Foro, sería conveniente que en caso de accidente se avisara a las autoridades competentes y que si se pudiera, se hicieran fotos o vídeos del entorno, así como grabar declaraciones en caliente. Que no nos fiáramos de la gente con la que rodamos, en éste caso de MTC, porque te podrías llevar sorpresas….
Éste hilo fue la consecuencia de una reunión de los administradores del Foro para decidir como hacer en referencia a un hecho ocurrido con anterioridad entre dos de los integrantes del Foro.
Eso es lo que voy a intentar narrar aquí. Un incidente de tráfico entre dos compañeros del Foro, que lamentablemente sigue causando perjuicios y molestias a varios de los usuarios del mismo.
Para el puente del 1 de mayo de 2014, MTC propuso una “ESCAPADA”, en ésta ocasión a Picos de Europa. A éste evento nos inscribimos 31 compañeros (24 motos). Nuestro punto de reunión fue el pueblo asturiano de Cangas de Onís, Escapada a Picos de Europa
Cuando estábamos finalizando la ruta del segundo día, a pocos kms del hotel, en el término municipal de Santillán, tuvo lugar un incidente de circulación entre dos de los integrantes del grupo, con el resultado de la caída de uno de ellos. Esto ocurrió en la retaguardia del grupo, a poca velocidad porque circulábamos detrás de un camión.
En seguida procedimos a atender al compañero caído, así como a retirar la moto accidentada de la calzada y controlar el tráfico en los dos sentidos.
El accidentado, afortunadamente no presentaba más que alguna contusión y su moto unos cuantos desperfectos en plásticos, retrovisores, óptica…
No voy a citar nombres así que seguiré llamándolo “el accidentado”.
Ante la lógica preocupación de todos nosotros por su estado, y sobre todo del compañero con el que se tocó fortuitamente, el susodicho nos aseguró que se encontraba bastante bien, dadas las circunstancias, pero sobretodo comentó, delante de mí y de todos los allí presentes, que la culpa había sido suya porque circulaba demasiado cerca de la otra moto.
Aparentemente todo acabo así. Fue el mismo accidentado el que gestionó por teléfono su asistencia. Despejamos la carretera, unos compañeros se quedaron con el accidentado y los demás, mayoritariamente, continuamos ruta hasta el Hotel.
Durante la noche, nos llegaron noticias de su estado físico tras pasar por un hospital y nos sentimos aliviados de que sólo fueran contusiones que no implicaban gravedad. Esto lo pudimos corroborar cuando coincidimos con el accidentado en la siguiente etapa de nuestro viaje, Pamplona. Por lo visto se sentía lo suficientemente bien como para continuar el viaje en taxi hasta allí y asimismo compartir con el grupo unos vinos y unos pinchos, cosa que nos alegró a todos.
Hasta aquí el relato de los hechos durante la Escapada.
La sorpresa fue que, meses después, al otro implicado en el incidente le llega una denuncia para un juicio penal por conducción temeraria en el juzgado de Cangas de Onís.
Evidentemente, cuando éste compañero solicitó algún testigo de los hechos para declarar, la mayoría de los que lo fuimos nos ofrecimos a prestar declaración.
Aquí hago un inciso.
De todo lo acontecido hasta el día de hoy y de todo lo que tiene que acontecer, porque aún no ha acabado después de más de un año y medio, lo más positivo es la respuesta en piña de todos los compañeros que fuimos testigos de ésta maniobra fortuita. Pero no nos ofrecimos a defender a uno contra el otro, sino a declarar lo que vimos, porque salvo ligeros matices, todos coincidimos. Y es lógico que haya ligeras variaciones en las declaraciones, porque de un hecho que dura décimas de segundo, ocho pares de ojos lo recuerdan ligeramente diferente, pero ninguna de ellos falta a la verdad.
Prosigo.
Por lo visto, nuestras declaraciones no fueron suficientes y se nos exigió que las presentásemos juradas ante notario, con el consiguiente gasto y trastorno, porque se tuvo que hacer a la carrera y en plena campaña navideña. Y dado el oficio de alguno de nosotros, supuso muchas molestias.
Con respecto al juicio, conseguimos que no tuviéramos que desplazarnos hasta Cangas y poder declarar por videoconferencia, pero fue un desastre porque falló la tecnología, no pudiendo declarar y perdiendo toda una mañana de trabajo.
El único que pudo declarar fue un testigo que se presentó por la acusación y que, como no podía ser de otra manera, declaró básicamente lo mismo que los demás.
La jueza que presidía el juicio desestimó la denuncia y absolvió al acusado porque consideró que no había ninguna acción punible en la maniobra.
Bueno, pues aproximadamente un año después llega otra denuncia y citación, ésta vez una demanda civil por daños y perjuicios. A éste juicio, que se celebrará el próximo 16 de diciembre, también ha sido convocado como testigo algún compañero que se tendrá que desplazar hasta Cangas de Onís porque ésta vez se ha negado la videoconferencia, con las consiguientes molestias.
En un juicio penal, como fue el primero, la acusación tiene que demostrar la culpabilidad del denunciado, por eso fue absuelto. En un juicio
civil parece ser que es el acusado el que tiene que demostrar su inocencia. Seguramente perderá el juicio. Según la fría ley, uno cayó porque tuvo contacto con otro, seguramente pagará una de las aseguradoras en concepto de responsabilidad civil, no se le darán más vueltas. Fin de la historia.
La conclusión es que el denunciante se embolsará unos cuantos miles de euros. Una cantidad ostensiblemente mayor que los daños y perjuicios reales. Al fín y al cabo es el único objetivo que tenía, dinero, sin temblarle el pulso ante ninguna circunstancia ética o moral.
Repito, que de todo esto, me quedo con la respuesta desinteresada de los que colaboraron de una manera espontánea y desinteresada, insisto, para explicar lo que vieron, no para ayudar a uno a vencer al otro.
Hay que subrayar que la mayoría de integrantes de MTC, nos hemos conocido aquí. A veces se hacen amistades porque nos encontramos con gente afín y otras muchas veces todo queda en una buena relación cordial, sin poder llamarlo amistad. En éste caso no era un grupo de amigos defendiendo a otro amigo.
Por mi parte decir que procuraré no volver a coincidir con “el accidentado” nunca más, por mi salud y mi economía, y en general, como decía el hilo al principio comentado, si acontece un accidente, procuremos recoger el máximo de pruebas y testimonios, así como pedir la intervención de las autoridades.
Es una pena recomendar, que en asuntos en los que hay intereses por medio, no fiarnos de la buena fe de los que ruedan contigo.
No pretendo con éste tostón abrir un debate ni un juicio paralelo, por eso no nombro a nadie.
Tampoco pretendo que MTC se pronuncie a favor ni en contra, pero como esto ha sucedido en el seno del mismo y en un evento organizado por ellos considero que a partir de ahora se vigilarán más de cerca éstos percances para evitar mayores consecuencias.
Mi única intención es lanzar un “aviso a navegantes” y desahogarme haciendo uso de mi derecho al pataleo, no es mi intención crear ni polémicas ni
discusiones, porque a día de hoy aún no ha acabado éste culebrón y sigue causando muchas molestias.
Gracias a todos los que habéis aguantado el rollo.
Vsssss.
![-sorry -sorry](./images/smilies/-sorry.gif)